En entrevista exclusiva con Lamula.pe, Álvaro Vargas Llosa se pronunció sobre la problemática de la actividad minera en el Perú y advirtió que "hay que asegurarse que el debate para la resolución del conflicto social no se convierta en un circo público".

Especificamente sobre el caso del proyecto Conga, una de las inversiones mineras más grandes de la historia del país, el politólogo insistió en que de la solución del conflicto debe resultar un hito histórico ejemplar para los conflictos venideros.

Este es un tema sumanete delicado y el más importante de todos en este momento y los próximos años. El gobierno no debe dejarse presionar, y debe tomarse todo el tiempo necesario para encontrar una solución justa, equitativa e inteligente que pueda servir de modelo para otros conflictos y que pueda abrir un espacio de consenso en el Perú por décadas.

Asimismo reconoció que existe un reclamo legítimo pero que los discursos extremistas entorno al conflicto son inaceptables, por ello recomendó que la solución debe orientarse hacia un punto medio.

En el Perú tenemos dos posiciones: Una dice que esto es básicamente el conflicto entre la modernidad y el progreso encarnada en las empresas mineras y la barbarie retardataria de las comunidades campesinas que no quieren el progreso. La otra, dice que que toda empresa minera por el hecho de querer ganar dinero en el interior del Perú es una agencia de explotación.

Estos discursos ocupan todo el espacio en la discusión pública y quienes tenemos una tercera posición no hemos encontrado una manera de hacernos escuchar. El gobierno tiende a una tercera posición. No se puede desconocer el reclamo legítimo. Es inevitable el conflicto, el sentimiento de invasión y discriminación para una persona que pertenece ancestralmente a una comunidad, viviendo en un lugar que considera suyo y que de pronto viene el Estado y le dice que es dueño del subsuelo y que le va a entregar todo eso a un extranjero.

Además, Vargas Llosa invocó al diálogo para evitar la imposición. Según el analista político, es necesario el entendimiento en un gobierno que se caracteriza por la pluralidad ideológica que lo constituye.

En cualquier caso hay que negociar, entenderse.Es inevitable el conflicto en un gobierno de ancha base que pretende compaginar a distintas sensibilidades en el país. Hay que buscar y negociar fórmulas. No se puede imponer soluciones a comunidades que tienen exactamente los mismos derechos que todos los peruanos, hay que tomarse el tiempo necesario para dialogar.

El también periodista valoró la gestión del presidente Humala porque está generando una situación de consenso entre las clases sociales del país. No obstante señaló que la disminución de su aprobación en los sectores C y D se debe a la impaciencia de los más desposeídos por participar del crecimiento económico.

Hoy tenemos una situación de relativo consenso en diferentes clases sociales de nuestro país, seria bueno que esta situación contribuya a que la herida social del Perú comience a sanar. El nivel de respaldo en los sectores C y D es muy alto, no tan alto como en la campaña, pero es inevitable evadir el factor de impaciencia de un sector que siente una gran urgencia de participar en la fiesta de la abundancia.